SIGLO XVI

     En base a los estudios de D. José Sánchez Ferrer y D. Francisco Delgado Cuartero (La pintura mural de las ermitas de Tarazona de La Mancha), apenas hay noticias documentales sobre esta ermita. Posiblemente las Relaciones Topográficas mandadas hacer por Felipe II, cumplimentadas en 1576 para nuestro municipio, se refieran a ella al señalar: "que en esta villa (Tarazona) hay un hospital para albergo de pobres caminantes sin renta fundado en limosnas de los vecinos del pueblo".

     San Roque es santo protector contra la peste y demás enfermedades infecciosas, de ahí que esta ermita sirviese de hospital para nuestro pueblo.

     Un documento de 1650 informa que existía cofradía de este santo en Tarazona.

     Es posible que a mediados del siglo XVII dejase de funcionar como hospital, pasando a dedicarse la ermita al culto al santo sanador. Aunque siglos mas tarde, coincidiendo con la Guerra Civil, la ermita volvió a ser hospital. A la conclusión de la contienda, el edificio fue quedando en desuso, y hoy únicamente se celebran cultos a Santa Lucía.

     La ermita, en la actualidad, pasa casi completamente desapercibida para el viadante debido a su total integración y alineación en la hilera de casas que la rodean en la propia Calle San Roque. 

     Es una reducida iglesia de nave única con planta rectangular, de algo mas de 13 metros de largo por 6'5 de ancho, donde no se marcan en plante presbiterio, crucero ni capilla alguna.  Posee una puesta de doble estilo castellano y una espadaña almenada que hace las funciones de campanario.

     De la decoración del interior conservan unas pinturas murales al fresco con motivos florales. Es de gran curiosidad la existencia de un cuadro con la crucifixión de Cristo, probablemente del siglo XVII.