Declarada Conjunto Histórico-Artístico Nacional, de un carácter muy popular, símbolo del rústico manchego (dicen que se encuentra entre las diez plazas más bonitas de España).

Este singular conjunto arquitectónico, data del Siglo XVII y se enmarca dentro del estilo colonial. Es una plaza rectangular, con hermosos balconajes de madera y amplios aleros. Se accede a ella por cuatro Arcos de estilo Románico: el de Castañicas, Juan y Medio, Chicharras y el del Ayuntamiento.

En un principio la plaza estaba totalmente cerrada con un quinto arco, llamado de Pedro Puma, que con posterioridad fue eliminado.


 


En uno de sus más bellos rincones, el único en que confluyen dos arcos, se halla un Escudo del Papa Inocencio XI. Por uno de estos arcos era tradición que entrasen los toros a la plaza, cuando antiguamente se utilizaba de coso taurino para la lidia de astados en días de celebraciones.


 



La FUENTE es de estilo clásico. Su año de construcción fué 1928, en conmemoración a la traída del agua potable al pueblo.


La Plaza es el corazón y el orgullo de los tarazoneros, cumple con un fin social y festivo, y exporta una de las imágenes más auténticas de La Mancha.

El Ayuntamiento es la única pieza de esta Plaza construida con soportales de arcos de piedra. El edificio del Ayuntamiento con la Plaza Mayor fue declarado Conjunto Histórico Artístico por la Dirección General de Bellas Artes en 1.968.

 

 

 

 

 

Guarda unas excelentes proporciones y se une mediante otro de los arcos al edificio más emblemático y sobresaliente de la localidad, la Iglesia Parroquial de San Bartolomé, obra de gran interés artístico.

 

 


Tras su última reforma, vista en la actualidad de la Plaza Mayor